Inconmensurable celebración la del día de nuestro patrón en el Club Cantábrico. Un éxito sin precedentes de participación y público. Este año celebramos el 25 aniversario de nuestra tamborrada con récord de participantes, demostrando así que el espíritu donostiarra del Club se hace cada día más presente. Aquí os dejamos el excelente reportaje fotográfico de Héctor Agudo, al que agradecemos su colaboración: Fotos Tamborrada Club Cantábrico 2024.
La noche empezó con la tradicional cena de la víspera, donde casi un centenar de socios, familiares y amigos disfrutamos de un exquisito menú. Velouté de bogavante, lomos de merluza en salsa verde con almejas y kokotxas, solomillo con piquillos, milhojas de crema, y vino, mucho vino y cava para celebrar nuestra festividad.
Como corresponde, a las 12 se tocó la marcha de San Sebastián en honor a nuestro patrón. Después se bailó, cantó y festejó antes de salir a la calle para presenciar la izada de la bandera donostiarra a las puertas del Club, acto singular que da comienzo a nuestra tamborrada. Antes, una comitiva de la peña Anastasio encabezada por su tambor mayor, Tasín Eceiza, hizo entrega al nuestro, Eduardo Pagola, de una placa conmemorativa del 25 aniversario de nuestra tamborrada. Agradecemos desde aquí a la Peña Anastasio el emocionante gesto.
Este año la compañía batió todos los récords con más de 150 participantes entre tambores, barriles y cantineras, a los que había que sumar familiares, amigos, parejas y público en general que nos siguió durante toda la noche. Pasadas las 12 no cabía un alma en los aledaños del Cantábrico.
Media hora más tarde se izó la bandera de nuestra ciudad al ritmo de la marcha de San Sebastián, a la que dos dantzaris rindieron honores desplegando su arte, como corresponde a la solemne ocasión.
Tras la marcha de San Sebastián sonaron Diana, Tatiago, Retreta, la Polka y todas las demás que no nos abandonaron en toda la noche.
La primera parada, en los relojes de la playa, resultó un momento memorable. En ella, tambores, barriles y cantineras demostraron una sincronía total con el fotógrafo, que en un instante supo captar el alma donostiarra de nuestra tamborrada, en perfecto estado de revista.
Tras esta breve parada nos dirigimos al emblemático pub Hollywood donde se tocaron las correspondientes marchas. De ahí, una compañía con el ánimo en lo mas alto, consiguió llegar a La Espiga para repetir el éxito y seguir disfrutando de la noche.
El recorrido terminó de vuelta en la puerta del Club. Resultó especialmente emotiva la interpretación, por primera vez en la historia de la tamborrada, de la composición Mutil Koskorrak, del ilustre pianista donostiarra Leonardo Moyúa Alzaga, conocido artísticamente como Leo de Silka, arreglada para la tamborrada por el trompetista Joxemari Oiartzabal. Un hito para el Club Cantábrico que no hubiera sido posible sin la iniciativa y el tesón de Gonzalo Serrats, descendiente del prolífico compositor.
Ya en el Club, pasadas las 4, se sirvió un caldo a los participantes que quedaban en pie. Todavía teníamos mucha noche que celebrar.
Aquí os dejamos otra vez el excelente reportaje fotográfico de Héctor Agudo, al que agradecemos su colaboración: Fotos Tamborrada Club Cantábrico 2024.